son una prenda de ropa diseñada específicamente para proporcionar tracción y agarré en situaciones donde el riesgo de deslizamiento es alto. Son muy comunes en deportes, actividades físicas y situaciones cotidianas donde se necesita estabilidad y evitar caídas, como en gimnasios, yoga, pilates, danza, o incluso en el hogar. Su característica principal es que cuentan con un diseño antideslizante en la parte inferior, que ayuda a prevenir deslizamientos sobre superficies resbaladizas.